Inquilinos


El mismo cuento de alucinaciones y brujería.



¿Cómo dedicarle las líneas suficientes a una cinta cuyo contenido ni siquiera está diluido, sino que parece el respaldo de unos cuantos bocetos preliminares? Inquilinos, me atrevo a decir tras presenciar los créditos, es la copia descarada de todos los clichés del cine americano actual. Pasando por referencias al universo El Conjuro hasta cintas de atractivo diseño de producción como Yo vi al diablo, de la que parece inspirarse mucho.

Una pareja se muda a un nuevo apartamento para iniciar de cero. A partir de ahí, lo que comienza como una vida de ensueño concluye con un rito satánico que quiere "justificarse" tergiversando toda la narrativa anterior a base de <giros de tuerca> demasiado evidentes o insulsos para darle el toque "demoníaco" que una cinta lo necesita.

El caso es que todo está muy muy "implícito" para no revelar la magia, aunado a que cuando el terror hará su presencia, el director opta por pasar a cambio de escena... y todo terminó. La música a ratos interesa un poco y, aunque naturalmente está filmado todo en...alguna parte de México, algunas situaciones son poco creíbles para realmente creer la idea de que eso ocurre AQUÍ EN MÉXICO.

Y para lo malo que es el producto, las actuaciones lucen de TELEVISA, ni siquiera llamativas o mínimo entretenidas. En resumen, NO veas la película. 

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