La Hora de tu Muerte

Como Destino final, pero más palomera; aunque con un par de comentarios rescatables.

6.5

Tipo de artículo:

Burla. 

Piensa en una mezcla de ideas entre Negra Navidad, Black Mirror y toda la franquicia de Final Destination. En las tres se conjuga la escalofriante premisa de que un mal desconocido, inminente e implacable acecha. Ni tú ni yo sabemos por qué, solo que es así.  Si ya hiciste la ecuación, sabes que el resultado es La hora de tu muerte (CountDown), una propuesta medianilla que toma de aquí y allá para ofrecer sustos genéricamente escalofriantes, momentos trillados, personajes muy divertidos y una trama que, en potencia, ES prometedora; en ejecución, me deja con un "¡Ah! ¿Por qué @$%&?". 

La Hora de tu Muerte es una cinta de terror cuyo tratamiento es superficial y, por lo mismo, forzada en sus intenciones (¿a quién se le ocurre bajar una aplicación que te dirá el momento exacto en que morirás?), con una trama pecadora de los momentos más genéricos (las escaleras, el médico abusador, las sombras de pies en el pasillo, o incluso el diminuto giro/espanto en la cama…) y con un elenco más o menos variado. Debo admitir que eso fue de los pocos elementos más rescatables en la cinta, y vaya que quería verla. Sí mis brincos en el aire, pero tras reflexionarla, me percato de lo ABSURDO que es el producto al final. ¡Caramba!

Y absurdo no en su ejecución técnica —muy decente, hasta eso—, sino en los agujeros lógicos que la película tiene en vías de mantener la “magia” de la premisa principal. Porque claro, si nadie bajara la aplicación maldita, ¿qué historia habría? Así que DEBE haber personajes tontos para que todo tenga lugar. Eso sí, algunos elementos son esperados, consecuentes y que obedecen a la lógica más básica como para que yo sienta que la película sucede en un universo creíble. Lo que sí es que introduce el prólogo del esbozo preliminar de vagas ideas o comentarios que pretenden (no lo consiguen) ser críticas sociales al despotismo, al abuso sexual, a la opresión y más, pero todo ello yace en un tercer o cuarto plano y únicamente sirve de trasfondo para que el conflicto principal de la cinta “avance”. 

Si bien Elizabeth Lail es quien hace de la protagonista que perdió a su madre y ahora solamente cuenta con su papá/hermana como una especie de resquicio emocional (siendo el papá el que aparece en menos escenas y la hermana el punto de debilidad de la protagonista, aunque genérica como personaje), la cinta deambula por varios aspectos sin realmente concretar ninguno. Puntos extra a dos elementos del elenco: el MEGA CARISMÁTICO sacerdote, quien aporta coloridos diálogos en sus momentos a cuadro, convirtiendo a La hora de tu muerte en algo muy cercano a una entrega de la franquicia Scary Movie y al actor Jordan Calloway como Matt Monroe, cuya presencia es agradable, pues reflejo seguridad y vulnerabilidad simultáneamente, soportando bien la trama con su talento. 

Eso sí, la película es lenta en su tratamiento y casi no presenta muertes ni como vehículo emocional de progresión psicológica. Lástima. Creo que, como decía hace poco, me reservaré el gusto de seguir viendo el cine de terror por un tiempo, por lo menos hasta que llegue algo como la primera parte de la franquicia El Conjuro. ¿Pido mucho? Está por verse.

Conclusión:

La hora de tu muerte me da pocos elementos rescatables, una música electrizante y prohibida, y un elenco llamativo y casi totalmente desperdiciado. ¿Quieres saber lo verdaderamente escalofriante? Que la aplicación de la película... sí existe.