El «Detrás de Cámaras» de cualquier artista.
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Comentario.
Vox
Lux es
la mirada “detrás de cámaras” que me confirma lo que yo ya suponía de tiempo
atrás respecto al mundo del entretenimiento: la vida llena de paparazzis,
presiones, drogas, broncas de familia, inestabilidad y mucho más. Lo que
cualquier artista puede vivir y que oculta al mundo, con tal de permanecer en
el estrellato. Puede que no sea ésa la intención, pero Vox Lux, gracias
a la impecable actuación de Portman y la voz en off de Willem Dafoe,
es un ejercicio de introspección cotidiano donde el “villano” es la
cotidianidad y lo infalible/erróneo del camino que tomamos. Aquí lo
interesante, sin embargo, es que, para la protagonista, el camino de la música
es una salvación sí o sí; no por gusto, sino por necesario.
Quizás por haber adoptado este enfoque es que la película tiene una
marcada atmósfera llena de crudeza, ventilación y muchas veces indiferencia
ante lo que un artista vive. No obstante, todo en Vox Lux surge a raíz
de una desgracia estudiantil, un evento probablemente no único, pero sí
inesperado. Por su contexto, su naturaleza o su motivación; un muchacho entra a
un colegio y, frente al alumnado, asesina a sangre fría a la maestra en turno.
La protagonista del fatídico evento, Celeste sobrevive a la catástrofe
y, marcada por la insidia, la circunstancia, la gente que la rodea y más, encuentra
en la música un escape a su desgracia personal, más emocional que física a mi
entender.
Y
claro, su escape no es gratuito, pues constantemente sufre fricciones de todo
tipo con la gente que la rodea, desde su gestor hasta el dueño de un
restaurante. Vox Lux enseña, entonces, lo que podría resultar evidente
en lo que “no se cuenta” de un famoso: los problemas que acarrea su estrellato,
sus adicciones, sus secretos, a quienes lastima y más, pero hasta eso su
retrato es crudo, es real, no tan absorbente, pero cuando llega el turno de Natalie
Portman para interpretar a la Celeste adulta, el film toma el camino del
enfrentamiento personal. Y algo que me gustó más es que, a pesar de que los
eventos personales de un artista pueden ser terriblemente difíciles, infernales
e incluso intensos, aquí el guion opta por abordar estos problemas de forma “episódica”,
con lo que el carácter de cada personaje involucrado es efímero, pero puntual.
Conclusión:
No
me parece un producto destacado, su narrativa no es novedosa, pero encuentro
honestidad. Y eso me parece suficiente.
Muy decepcionante. Siento que a final de cuentas no contaron nada. Al final dice él narrador que Celeste vendió su alma al diablo para alcanzar la fama, tan fuera de lugar todo eso y sin sentido. Las canciones horribles, ignoro si cantó Natalie o alguien más , pero fea voz, fea letra, fea música, feo todo.
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