Era el año 2009 y la tecnología móvil estaba en su apogeo, principalmente porque la comunicación había encontrado en el internet una manera fácil, efectiva y prácticamente inovadora de enviar los mensajes: BlackBerry Messenger, sutilmente sucedido por nada más y nada menos que WhatsApp, que le quitó terreno porque ofrecía simpleza frente al molesto protocolo de "registrar" el código de tu receptor para mandarle mensaje. Por esa misma razón, BBM duró aproximadamente un año (si no me falla la memoria). Y sí, BBM comenzaba a ser "molesto" porque para permitirnos agregar a personas a nuestro directorio, necesitábamos de ese código alfanumérico, en el caso más complicado, para incrementar nuestra "cartera de usuarios".
Así que entre 2008 y gran parte del año 2009 WhatsApp comenzó a hacerse terreno, aunque su interfaz y visualización inicial se diferenciaba poco de la aplicación blanquinegra, hasta que le dieron uso y paulatinamente comenzó a ganar seguidores y destronar, eventualmente, a su competencia más directa. ¿Por qué? Porque "la verde" (como yo llamo peyorativamente a WhatsApp) nos vendió, de inicio, la misma idea que su ofrecía su entonces adversario directo: mensajería instantánea.
Lejos ha quedado para la gran parte del planeta aquella vieja aplicación llamada "SMS", que consiste en un formal envío de mensajes sin ningún tipo de tecnología involucrado: envías mensajes, recibes mensajes. Sonaba de forma intermitente; ese fue el sistema por definición que se usaba, hasta que, como se dice empresarialmente, "alguien pensó en innovar esa herramienta" y ¡vióla!, llegaron las redes sociales y los sistemas de mensajería instantánea, que no es que sean "gratis" en el sentido estricto del término (te consumen datos, y eso implica internet, que de por si no es gratis tal cual), sino que, al estar incluidos en los planes de compañías telefónicas, puedes acabarte tu internet y sigues pudiendo enviar audios, fotos o pesadísimos videos por estas "apps".
Bueno, los años avanzaron y la gente empezó a conocer más y más WhatsApp, hasta que en septiembre de 2013, llegó al mercado otra aplicación que, en ese entonces, era prácticamente inexistente, pero que con los años fue ganando su respectiva popularidad: Telegram. Pero, en un contexto en el que enviar mensajes escritos mensajes de voz, audios, videos y contactos es lo más básico, ¿qué puede ofrecer la aplicación de fondo azul y avioncito blanco?
A continuación una comparativa detallada de cada una de las funciones de las dos plataformas de mensajería más famosas del mundo:
1) Privacidad: De origen, para añadir a un contacto debían intercambiar números telefónicos en WhatsApp. Con Telegram NO es necesario, basta con que crees un "nombre de usuario" y lo compartas, manteniendo "en secreto" tu número.
2) Usuario: Entre muchas variantes de la privacidad en tu cuenta, puedes subir fotos como ID de perfil o... subir videos pequeños como en IG. Va el tutorial:
3) Mensajes: Prácticamente cualquier aplicación o red social ofrece lo más básico que es permitirnos enviar cualquier mensaje a uno o más receptores. Y en este sentido, la simpleza de WhatsApp es "autoridad" y permite un fácil entendimiento. Envío mensajes, recibo mensajes. Tan tan.
4) Multimedia: Aunque en un inicio ambas aplicaciones ofrecían esta opción de forma limitada, es poco sabido o poco recordado que WhatsApp, en un principio, te impedía enviar más de 10 fotos por ocasión, contrario a Telegram que (gracias tu red o el WiFi en que estuvieras conectado/a) te permitía enviar al menos 15 fotos por ocasión. Ya no hablemos de videos o audios. Mientras WhatsApp es rápida en en esta clase de envíos, su problema principal es que duplica o incluso triplica el almacenamiento de multimedia en los celulares, atascando el espacio del celular; contrario a Telegram, que mantiene la multimedia en su celular. Además, la aplicación del avioncito blanco te permite enumerar el orden de tus envíos.
Actualmente, ambas son capaces de enviar más de 10 fotos y/o videos por ocasión; obstante, un plus de Telegram es que no solamente te permite enviar hasta 100 fotos/videos (la velocidad dependerá de tu red de internet), sino que además te permite enviar en orden; es decir, tú decides qué foto/video va primero, luego cuál sigue y así sucesivamente...
5) Chats y envío de multimedia: WhatsApp NO cuenta con la opción para editar mensajes ya enviados, pero sí para "eliminarlos", aunque quede ese "registro". Veamos las siguientes muestras (primero con WhatsApp, después con Telegram):
Ahora con Telegram:
Soporte de Envío: Mientras que WhatsApp, tanto en su versión móvil como de Escritorio, no te permite enviar más de 70MB por ocasión, en Telegram (no importa si es en iPad, en celular, en computadora o qué dispositivo) puedes enviar fotos, videos, mensajes o archivos de hasta 2GB.
6) Edición: Si bien WhatsApp tiene muchas desventajas, es claro que Telegram también sufrió en sus inicios el ser capaz de mejorar la calidad de las fotos que subían a su red. Actualmente cuenta con una impecable función que permite una edición sin precedentes para mensajes, fotos y videos, incluyendo filtros que son, en la opinión de varias personas, algo muy similar a lo que ofrece SnapChat.
7) Descarga automática de multimedia: Aunque actualmente WhatsApp ya habilitó la opción que permite NO almacenar multimedia en el celular, ésta "permanece" en la caché de la plataforma, lo que técnicamente sigue siendo un problema si te da cosa atascar tu dispositivo; si no, continúa enviando fotos/videos, pero dependiendo de si tu celular es Android o iPhone, es si tu Sistema Operativo te avisará o no... Telegram, por su parte, te permite decidir si guardarla o no en la galería, respetando tu espacio de almacenamiento en el teléfono.
8) Grupos: WhatsApp, hasta donde sé, nos permite tener grupos de hasta 256 miembros, añadiendo breves funciones como la designación de administradores y la opción para que solamente ellos (no tanto los usuarios "normales") puedan seguir escribiendo en el chat en caso de que quien haya fundado el grupo bloquee la opción para seguir mandando mensajes, además de que cada vez que añades a alguien a tu grupo, esta persona no es capaz de ver el historial de mensajes previos a su llegada, gusto de algunos, disgusto de otros.
Por su parte, Telegram permite tener grupos muchísimo más extensos (arma de doble filo según el gusto de quien use la aplicación...): permite tener grupos con hasta 22,000 miembros activos. Y no sólo eso: también es posible habilitar o deshabilitar al gusto el historial de mensajes, para que quien se una a un grupo o sea añadido/a, pueda ver lo previamente compartido y así tener un margen mucho mayor de participación.
9) Canales de difusión: Mientras que WhatsApp te permite crear listas de difusión para que un mensaje, audio, foto o video le llegue a una inmensa cantidad de personas simultáneamente, en Telegram los canales de difusión son similares con la diferencia de que, a partir del canal, puedes crear un grupo en el que los miembros de tu canal interactúan sobre aquello que publicas, no responderte a ti como si de un envío privado se tratara.
Crear un grupo o canal es algo relativamente sencillo en ambas aplicaciones. No tengo que profundizar en cómo crearlo en WhatsApp porque, de nuevo, esta aplicación peca de sencillez. En Telegram debes seguir los siguientes pasos:
10) Personalización de Chats: WhatsApp incorporó recientemente la novedad de que puedas personalizar el fondo de tus conversaciones individualmente, caso que no ocurre [aún] con Telegram; sin embargo, la aplicación con icono de avión blanco y fondo azul tiene otras "monerías" o curiosidades bastante interesantes que le hacen competencia a esta funcionalidad de la aplicación Verde. Telegram te permite poner fotos, y colores adicionales, si es tu preferencia. A continuación:
11) Funciones adicionales: En WhatsApp envías un mensaje, audio, foto, video o documento a tu receptor... y párale de contar. Funciona y es preciso; es útil. Pero... ¿sabías que Telegram tiene otras funciones que van más allá? Algunas como programar un envío o, incluso, enviar en silencio un mensaje, un audio, una foto o un video... Y hablo de que puedes programar un envío (mensaje, audio, video, música) para que a tu contacto le llegue hoy más tarde, mañana... o la próxima semana. ¡Tú decides cuándo!
12) Mensajes de voz o "audios": Hasta hace como un año, WhatsApp no mejoraba o <reparaba> la molesta función de que, si recibías más de un audio seguido, éstos no se reproducían por sí solos. Ahora ya es posible (se lo copió a Telegram, como los estados a Instagram...). Sin embargo, otra pequeña variación que ya incorporó y que le copió a Telegram es que puedes salirte de la aplicación y... [poder] seguir escuchando tus audios sin problema.
13) Nube de respaldo: Desafortunadamente WhatsApp no cuenta con una opción para preservar lo que recibimos o lo que enviamos, al menos no como debería (he leído que ya trabajan en eso). Mientras la empresa implementa la opción, Telegram desde siempre ha contado con su propia nube de almacenamiento ilimitado y gratuito. Puedes guardar lo que quieras el tiempo que quieras.
14) GIFS: El envío de GIFs tanto por WhatsApp como por Telegram es variado. Basta con "alternar" en el teclado aquí y allá para acceder a ellos y poder enviarlos. En Telegram, la forma más fácil es:
15) Stickers o "estampillas animadas": La función de moda actualmente en ambas. Aunque los stickers de WhatsApp sin duda han mejorado, personalmente creo que siguen a años luz de lo que son los stickers en Telegram, pues los de esta segunda plataforma implementaron la opción de "estampillas en movimiento" mucho antes. Además, su "conexión" a los emojis es natural, mientras que en WhatsApp es cuestión de buscarle...
15) Stickers o "estampillas animadas": La función de moda actualmente en ambas. Aunque los stickers de WhatsApp sin duda han mejorado, personalmente creo que siguen a años luz de lo que son los stickers en Telegram, pues los de esta segunda plataforma implementaron la opción de "estampillas en movimiento" mucho antes. Además, su "conexión" a los emojis es natural, mientras que en WhatsApp es cuestión de buscarle...
16) Música: Si tienes cuenta en Spotify está muy bien, pero... ¿sabías que puedes bajar música en Telegram? Va el tutorial:
17) Sincronía: Aunque ya WhatsApp-Web y de Escritorio están aplicando medidas de seguridad y aumentando la gama de funciones para que sus usuarios se sientan más cómodos, cuando usamos WhatsApp-Web, el mismo programa nos dice que el celular DEBE tener la pila suficiente o la versión de Escritorio de WhatsApp NO funcionará. Sin contar que, si estamos escuchando un audio o viendo un video, no hay opción para hacer más, que esperar a que el envío concluya. Con Telegram, esta función va más allá: Supongamos que descargas Telegram en tu celular, pero también descargas la versión web (como si descargas Zoom o Microsoft Word en tu computadora). Si por cualquier cosa a tu celular se le acaba la pila, no te preocupes: A diferencia de WhatsApp, Telegram es mensajería basada en la nube con sincronización constante. Como resultado, puedes acceder a tus mensajes, audios, videos, fotos, etc... desde diferentes dispositivos a la vez, incluyendo tablets y computadoras, y compartir un número ilimitado de fotos, videos y archivos (doc, zip, mp3, etc.) de hasta 2 GB cada uno.
Puedes mantener toda tu multimedia en la nube sin necesidad de eliminar cosas, simplemente borra la caché para liberar espacio.
18) Multi-funcionalidad: ¿Estás escuchando un video y te llegó un mensaje de trabajo urgente? ¿Estás escuchando un audio y recordaste que debes escribirle a otra persona algo importantísimo? En WhatsApp impera la ley "una persona a la vez"; en Telegram, puedes seguir teniendo las actividades iniciales en segundo plano, tercero o hasta cuarto. Puedes tener conferencias de voz, ver un video o escuchar un audio de un chat mientras escribes en otro chat..
17.1) Conferencias de voz:
19) Negritas o Cursivas: En WhatsApp basta con usar _ o * para aplicarlo. En Telegram hay dos opciones. Va el tutorial de la más sencilla (que incluye otras variantes):
20) Carpetas de chats: ¿Tienes un buen de chats y no sabes cómo ordenarlos o por dónde comenzar?
Aunque es cierto que ambas plataformas de mensajería cuentan con la opción para Archivar chats, Telegram ofrece el plus de crear carpetas para clasificar los chats. Va el tutorial:
Y un poco a diferencia de WhatsApp, Telegram te permite modificar tu perfil de privacidad a tu antojo. Si no quieres que te escribes o que te incluyan en un grupo, si necesitas o quieres bloquear a una persona molestosa o algo, lo puedes hacer.
Las únicas características que Telegram NO tiene (aún) y WhatsApp sí, son dos:
a) internet ilimitado.
b) Historias (tipo Instagram).
Y después de casi ocho años en el mercado, Telegram ha crecido exponencialmente (ya cuenta con poco más de 500 millones de usuarios a nivel mundial [más considerando la polémica a inicios de este 2021]), y como no entra aún en la categoría de "redes sociales ilimitadas" porque las compañías todavía no la incluyen en sus paquetes telefónicos, hay esperanza. El efecto en cadena o "boca-en-boca" puede hacer milagros, cambiar eso... Después de todo, así empezó WhatsApp.
Así que, ¿eres de WhatsApp o eres de TELEGRAM? ¿O ambas?
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NOTA: Aunque este artículo lo escribí el 25 de noviembre de 2017, lo he actualizado hoy 1 de febrero de 2021.
NOTA: Segunda actualización, 1 de julio de 2021.
NOTA: Segunda actualización, 1 de julio de 2021.
Jajaja tu artículo. Comienzo a sospechar que te pagan por hacerle publicidad a Telegram ������. Se ve que amas esa aplicación. Sí tiene cosas buenas, como sus video mensajes, los stickers animados, y el reproductor de canciones. Pero sigue sin ser tAn popular, además no puedes subir estados ni frases y en WhatsApp sí.
ResponderBorrarYo uso las dos, ya que lo que no tiene una, lo encuentro en otra.
Jajaja tu artículo. Comienzo a sospechar que te pagan por hacerle publicidad a Telegram 😂😂😂. Se ve que amas esa aplicación. Sí tiene cosas buenas, como sus video mensajes, los stickers animados, y el reproductor de canciones. Pero sigue sin ser tAn popular, además no puedes subir estados ni frases y en WhatsApp sí.
ResponderBorrarYo uso las dos, ya que lo que no tiene una, lo encuentro en otra.