Análisis: la transición del estilo en la Literatura Española y otras vertientes


(el siguiente texto es un mero esbozo de otro que viene en camino)

Es indudable que la literatura clásica, la española y la contemporánea divergen marcadamente en el contenido que han ofrecido de miles de años a nuestra época. Quizás podemos hablar, no solamente de un cambio en el estilo, sino también en la forma, en también los intereses y el medio para expresar estos valores en el inconsciente colectivo. El cambio en la forma, en el interés y el estilo puede subsumir la manera de abordar tópicos como lo romántico, lo criminal o incluso los temas que siempre han versado sobre el individuo en el sentido negativo de su actividad, de su hacer: como transgresor del sistema social. La literatura siempre ha mostrado una cierta inclinación por el individuo con valor, con crítica y con espíritu. Esto desemboca, un poco, en el asunto de la libertad.

Por esto el tema de la libertad, vista en otras disciplinares similares como la Filosofía y la Teología, conduce a replantear preguntas básicas que rodean la existencia del individuo. ¿Podemos realmente hablar de la capacidad de hacer? ¿Existe o no existe? ¿Es una ilusión o un paradigma? ¿Qué cariz social presenta? Puede ser un paradigma, tanto por los modelos que ha mostrado y cambiado a lo largo del tiempo. Porque, incluso como la Historia, Literatura ha intercalado, a través de los siglos, su foco de estudio (o "enfoque"), pasando del individuo al conocimiento, o de éste a la sociedad, o incluso todo lo relacionado a la divinidad.

Enjuiciada la capacidad como coerción positiva o negativa, la transición del estilo literario radica en que no solamente ha cambiado la manera de narrar al individuo contra la opresión social, sino que incluso ha permeado en sus intenciones; traspasada la barrera de lo imposible para tejer posibles estructuras más allá de lo determinado o lo marcado por el orden social, el espíritu literario, que funge como agente de la voluntad, es inmanente al cambio, al deseo y al interés. Lo dudo. El espíritu será lo que permite que la voluntad avance, y en la Literatura esto ha quedado más que aclarado.

Así pues, surge la lucha entre la consciencia individual, la posibilidad, el margen socio-político y, por consiguiente, el estilo como un elemento activo que subraya carencias y exaltaciones, reglas y rebeliones, pero sobre todo, a la Literatura como una de las disciplinas más profundas que existen desde los comienzos del Hombre...

Próximo texto: Literatura y Crisis. 

1 comentario:

  1. No me quedó muy claro lo que quisiste expresar. Salvo que la Literatura ha sufrido cambios, debido al contexto social e histórico. Mencionas que es una disciplina y no, es considerada una de las bellas artes.
    Espero el texto de Literatura y Crisis, para tratar de comprender mejor.

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